Drinks conmovedores en el Champagne Bar del Alvear

Inés de Los Santos, gran maestra, juega con osadía y savoir faire y crea, con fórmulas clásicas, nuevas expresiones de la coctelería. Imperdibles!

Es un placer ir al Champagne Bar del Alvear Palace Hotel, impactan la belleza decó de su espacio íntimo -sólo para 17 personas-, la alegría del ambiente y, al leer la carta de drinks con atención, la imaginación de su propuesta estimula a pedir todo; imposible de una sola vez…

Para este lanzamiento, la dirección del hotel convocó a Ines De Los Santos. La experimentada bartender recreó con paladar y nariz creativos combinaciones clásicas en nuevas recetas con ingredientes de refinada calidad en ensamble natural con espumantes y Champagnes Moët Hennessy.

De Los Santos construyó una batería de diez fórmulas muy sabrosas, para todos los gustos y momentos. No falta la versión Negroni, un AGED NEGRONI SBAGLIATO que tiene como base el licor de expedición del Baron B –un lujo-, gin Bombay, Campari y el Baron B Nature; luego lo a?ejan en barrica; es potente. El FIZZ GUN POWDER, reúne gin infusionado con té verde, almíbar de limón, zestes de lima y Chandon Brut Nature; una infalible conjunción de perfumes. En el AMARENAS KIR hermana tres íconos de la barra, el Baron B Extra Brut, el Maraschino Luxardo y un almíbar de amarenas; trilogía que nació para convivir. En el OLD CHAMPAGNE COCKTAIL Inés rescata a esa golosina de jengibre de la cocina del hotel y hace su alquimia con Baron B Extra Brut, Drambuí, Bitter de naranja y la Ginger Candy; dulce y picante. No debía faltar un nombre nippon en esa barra, ya que los japoneses aman beber. TOKIO SLING, Chandon Extra Brut, sake, jugo de pepino fresco elaborado en el momento y shiso, hoja mentolada que abre el apetito; refrescante, para comer sushi. L’HUGO es una especie de spritz, con almíbar de flor de sauco de Bariloche elaborado por la chef Mariana Müller. Lo combina con Chandon Extra Brut, menta fresca y lima; fresco y floral. GUINDADO Ti PUNCH, típico de las islas francesas caribe?as, este ponchecito sumerge los pies en las arenas blancas de la memoria sólo con los aromas que despierta la fusión del Baron B Rosé, Ron Havana Blanco, Ron Santa Teresa Selecto, licor Guindado, Amargo Angostura, almíbar de ananá y frutas de estación; relajante, para tomar en grupo. LA VIE EN VERT es una mixtura sorprendente, Baron B Brut Nature, Cognac Hennessy V. S., jugo de manzana y limón; equilibrio de fruta fresca, sabores a?ejos y burbujas. LA PROVENCE MIMOSA, homenaje al cocktail creado en 1925 en el Ritz de Paris -el nombre refiere a las flores del árbol Mimosa del Sur de Francia de las que nacieron exquisitas fragancias-. Aquí la bartender recurre a la lavanda, flor que perfuma el Llao Llao Hotel de Bariloche, y hace su alquimia con Veuve Clicquot, jugo de pomelo rosado y bitter de lavanda; un lujo. Este ensamble es para hacer un Mimosa bottle service de grupos. FLORES PARA ROSSINI imprescindible el Moët et Chandon Rosé elixir con Saint Germain y jugo de frutillas elaborado al instante, es un drink de estación; romántico y sabroso. La firma de esta bartender enriquece una propuesta prodigiosa.

A este significativo desarrollo la carta suma todo el portfolio Moët Hennessy de Champagnes y espumantes y otros alcoholes infaltables en las barras como vinos y whiskys. Junto a las bebidas hay opciones gastronómicas pensadas para acompa?ar los cocktails y un servicio de sushi a la vista los días jueves a sábados.

No extra?a a los entendidos la apuesta del hotel en la Argentina porque es el país que más reverencia al Champagne fuera de Francia, ya desde la Belle Époque. En 1960 Moët & Chandon, la Maison de Champagne, encontró en las tierras mendocinas un segundo hogar para desarrollar sus vinos, también en el Nuevo Mundo. Por eso es una excelente noticia saber que el Alvear Palace Hotel inauguró un bar especial dedicado a esta bebida burbujeante propicia para celebrar justamente asociado a Moët Hennessy.

Quienes viajan por las grandes ciudades y capitales del mundo, comprueban que en los hospedajes de lujo fueron in crescendo las ofertas de espacios algunos muy sofisticados, dedicados a la noche y a la hora de los cocktails. Además Buenos Aires no es ajeno a esa tendencia internacional, por eso un hotel tradicional y de lujo como el Alvear Palace decidió recrear su idea de un Champagne Bar, único en la Ciudad. Este es su segundo bar, porque el Lobby Bar es un Notable certificado por la Ciudad de Buenos Aires y continúa siendo el lugar ícono del hotel.

Con respecto al ambiente íntimo y muy exclusivo del Champagne Bar es un Art Decó muy auténtico. Sus paredes están revestidas en madera de raíz de nogal lustrado brillante con detalles dorados a la hoja en bajorrelieves. Hay superficies de espejos en rombos biselados, tapizados en cueros de color marfil y géneros en animal print de leopardo, importados especialmente de Francia. Los mármoles como el portoro de veta dorada, el carrara y el amarillo Valencia, están combinados con el piso en figuras de rombos, también en bajorrelieves. El cielorraso acompa?a ese dise?o. Todos los artefactos de luz, apliques y ara?a, son de bronce pulido y vidrios esmerilados de formas geométricas al estilo Art Decó. Las mesas en su tapa tienen una marquetería en rombo radial en nogal y un aro perimetral en bronce. El Art Decó fue elegido para todo el dise?o del Bar, porque refleja mejor que ningún otro estilo la opulencia, el glamour, la exclusividad y el lujo a través del uso de materiales caros, sólidos y puros. El proyecto interior lo realizó el gerente de decoración, arquitecto Ariel Levy con el gerente de obra, el arquitecto Alejandro Otazu.