La Celia: espíritu pionero

La bodega mendocina fue la primera en plantar Malbec en Valle de Uco. Hoy, 133 años después, la llama que los llevó a descubrir nuevos horizontes sigue tan viva como nunca. Su historia, su presente, sus vinos.


por MANUEL RECABARREN

@manurek


El Valle de Uco se puso de moda, no hay dudas. Aun quienes están dando sus primeros pasos en el mundo del vino reconocen la I.G. al encontrarla en una etiqueta, y muchas veces hasta la interpretan como sinónimo de calidad. Leemos constantemente estudios sobre sus regiones, suelos y viñedos. Sin embargo, para conocer realmente un lugar no basta con repasar su geografía, sino que también hay que saber sobre su historia.



Y si hablamos de la historia del valle hay que hablar de una bodega: La Celia, los pioneros de la región. Eugenio Bustos, su fundador, plantó bandera en 1890, más de ciento treinta años atrás. Si el Valle de Uco aún es novedad, ¡imagínese usted en ese entonces! Tal fue el aporte del señor Bustos a la zona que hoy un distrito del Departamento de San Carlos lleva su nombre. La bandera no fue lo único que Eugenio Bustos plantó en Uco, por cierto: también introdujo la Malbec. Hasta entonces nuestro varietal de bandera era reconocido dentro de Mendoza por su versión Luján de Cuyo.



Si saltamos al presente vamos a observar que el espíritu pionero de La Celia sigue intacto. Se ve reflejado en su enóloga, Andrea Ferreyra, quien trabaja con la bodega desde 2006 y es -aún hoy- una de las pocas mujeres que lideran equipos de enología en el país. Andrea es una mujer de profesionalidad intachable y una gran conocedora del terroir del Valle. La línea más reciente de la bodega lo demuestra: tres etiquetas que exponen lo mejor de los terruños donde La Celia tiene viñedos.


El Terruño de Paraje Altamira es un típico Malbec de las zonas frescas de Mendoza: fruta roja, austera y ácida, con mucha flor y algo de hierbas. En el de La Consulta el suelo imprime toda su mineralidad en un Cabernet Franc complejo, con notas de grafito y pólvora. Completa la trilogía el Terruño de Eugenio Bustos (la localidad), un Cabernet Sauvignon más clásico, con todas sus especias dulces y costado vegetal, pero con la elegancia que la altura del valle le otorga.



Si bien la bodega nos tiene acostumbrados a grandes tintos, también experimenta con algunas blancas en Uco. Su Chardonnay es un gran clásico aggiornado que no falla, pero para nosotros la más interesante es la Pinot Grigio, poco utilizada en Argentina. Fresco, lleno de fruta de carozo, cítricos y flores blancas, que no tapan el costado mineral tan típico de los suelos de donde nace. También tiene algo de trabajo con lías, para agregar volumen.



La historia de nuestras zonas vitivinícolas es rica, vasta y apasionante. Conocerla es menester. También a sus actores, aquellos pioneros que se arriesgaron y cargan parte importante de nuestro presente enófilo.






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