Un ícono de la ciudad

El Plaza Hotel plasmó en sus memorias cien a?os cumplidos como parte de la ciudad. Los personajes que se hospedaron y su restaurante, el Plaza Grill.

En 1909 Buenos Aires se transformaba en una ciudad cosmopolita. Había una gran efervescencia, la Belle …poque reinaba, se viajaba mucho a Europa, se copiaban estilos de arquitectura, decoración, vestimenta y modelos de vida; se conocían los últimos descubrimientos científicos y el tango, que era algo nuestro, se iba apreciando. A finales del  siglo XIX y principios del XX, el país vivió un gran desarrollo cultural. Buenos Aires atrajo la mirada de los intelectuales europeos. En 1906 la visitaron el dramaturgo Jacinto Benavente y la actriz María Guerrero. En 1908, Gregorio de Laferrere publicó Las de Barranco, y José Ingenieros, El hombre mediocre, dice Oscar Fernández, en su libro Buenos Aires Tango. Historia de un amor compartido.

Se acercaba el Centenario, el gran festejo, la ciudad necesitaba un gran hotel de perfil internacional y un a?o antes se inauguraba el Plaza Hotel. El empresario más importante de la época, Ernesto Tornquinst, lo mandó a construir frente a su propio palacete. La sociedad porte?a lo adoptó inmediatamente y, desde esos días, forma parte de la agenda de muchos, no sólo como hospedaje sino en las celebraciones, para ir a comer o tomar algo. Al cumplir 100 a?os, la compa?ía que conduce a este ícono en la Plaza San Martín, Marriott Internacional Inc, rindió homenaje al aniversario, editando un libro que plasma su historia y que vale la pena conocer.

Emperadores, reyes, príncipes, protagonistas del jet set internacional, artistas de Hollywood, divos y divas del mundo de la música, los primeros astronautas, presidentes y políticos estuvieron hospedados en este hotel. Algunos hasta pidieron modificaciones en sus suites, antes de llegar. Luciano Pavarotti en 1987 (esta redacción fue testigo) pidió que le armaran una cocina para disfrutar de su comida a piacere. Arturo Toscanini, enamorado de María Callas, se enteró que en la mesa de su suite había comido la soprano y decidió comprarla.

El restaurante Plaza Grill es uno de los pocos espacios del hotel que se mantienen intactos desde 1909. No era en ese momento el restaurante principal del hotel, era el lugar confortable que la gente elegía para comer sin etiqueta. Fue el primer restaurante de la ciudad con aire acondicionado: funcionaban ventiladores sobre barras de hielo, escondidas alrededor del salón. Su cocina, criolla y francesa, respondió siempre a las predilecciones de la clase alta porte?a. Actualmente, de lunes a viernes por la noche, hay un menú de la Belle …poque, que recuerda esas recetas: huevos Po Parisky, lomo Eduardo VII, centolla Sarah Bernhardt, mollejas Demidoff y Pato a la prensa —el más solicitado por los habitués, que durante 15 minutos ven la elaboración del plato en el mismo salón-. La cocina que hoy lleva adelante el chef Gabriel Mazzeo es de estación, con rasgos porte?os, además del grill. Su carta ofrece codorniz en escabeche, carpincho ahumado con chutneys, salmón gravlax; platos de la cocina como el medallón de cerdo, el roll de roast beaf o los sorrentinos de setas y pesto; del grill salen las piezas de vacunos y pescados más deliciosos y, como postre, el pastel de zanahorias y jengibres es uno de los más apetecibles. Los domingos de oto?o-invierno, al mediodía, se sirve el tradicional puchero, al que las familias asisten con fervor.

PLAZA GRILL
Plaza Hotel Buenos Aires, a Marriott Hotel
Florida 1025
Reservas 4318-3074

Fotografías gentileza Marriott Plaza Hotel



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