4 vinos dulces y riquísimos

Aunque tengamos ciertas aspiraciones anti establishment, siempre terminamos cediendo ante las presiones sociales para hacer lo que NO queremos. Para los que juraron no sucumbir a la fiebre de la dizque Semana de la Dulzura, les dejamos cuatro vinos dulces que les van a servir para transitar el trauma de tener que pertenecer de prepo. Y lo mejor de todo es que son muuuy ricos.

por ANA PAULA ARIAS


ALAMOS MOSCATEL DE ALEJANDRIA

(CATENA ZAPATA -  TUNUYÁN, MENDOZA) 

92 PTS.




La Moscatel es una uva que se usa en todo el mundo para hacer vino dulce. Es muy aromática y sirve para hacer vinos que, como este, resultan dulces sin ser empalagosos ni cansadores. Punto extra para la etiqueta, que es llamativa y preciosa.


 

DESEADO TORRONTÉS 

(SCHROEDER - SAN PATRICIO DEL CHAÑAR, NEUQUÉN)  

93 PTS.




Quien prueba Deseado se hace fan, es sabido. Un espumante de Torrontés que sirve para brindar en las mesas festivas, claro que sí, pero también para beberlo todo el año como un aperitivo fresco y levemente dulzón. Una delicia patagónica que hay que probar.


 

MALAMADO 

(ZUCCARDI - VALLE DE UCO, MENDOZA) 

94 PTS.




Su nombre es la sigla de Malbec-A-LA-Manera-De-Oporto. Un vino que recrea el estilo típico de los fortificados portugueses. El resultado está súper logrado. Es casi obligatorio tomar alguna vez en la vida una copita de Malamado con torta selva negra. Un lujo posible.



CAFAYATE GRAN LINAJE TORRONTÉS TARDÍO 

(ETCHART - CAFAYATE, SALTA) 

93 PTS.




Imposible no amar este tardío. Incluso para los que no son fans de lo dulce, es un vino memorable. Las uvas se cosechan más tarde, ya pasificadas, y el jugo que se extrae está mucho más concentrado, con una alta graduación de azúcar. Va genial con queso de cabra, cayote y nueces. Una experiencia norteña en el sillón de tu casa.




Comentarios