Vinos, primavera y unicornios: así fue la degustación de septiembre del Club Cuisine&Vins

Los primeros soles serios de esta mitad del año renovaron nuestras energías, que pusimos en una degustación en la que hubo música, risas y algarabía por demás. Y vino, por supuesto. Muy buen vino.





Estos meses que quedan hasta que termine el año pueden resultar lentos y aceleradísimos a la vez, y con el calor y el regreso de las hojas y las flores también empezamos a sentir la ansiedad por el verano, las playas y los vinos que se toman al lado de la pileta. Todo esto forma parte de la primavera, estación en la que todo se renueva y se nos van las ganas de pasar las noches encerrados viendo series.

Decidimos, entonces, hacer una degustación florida y vibrante para nuestros socios del Club Cuisine&Vins, sorprendiéndolos con un lugar conocido por sus rincones exóticos y su mística ecléctica: el Hotel Faena Buenos Aires. Comenzamos con la recepción en The Library Lounge, un espacio que bien podría estar dentro de un hotel antiguo en algún destino lleno de nieve y esquiadores. Ahí, sentados en cómodos sillones de cuero y terciopelos varios, a la luz de candelabros de cristal y pisando mullidas alfombras, nuestros socios e invitados probaron algunas de las delicias de la cocina del Faena, maridadas con buen espumante. Picoteos, fotos, algunas preguntas para nuestras redes, y conversaciones varias antes de pasar a la cata propiamente dicha.

Se abre una puerta, del otro lado una luz bastante más brillante que la que hay en el Lounge. Pasamos todos a Bistró Sur, entonces, donde nos reciben filas de mesas redondas rodeadas de sillas y sillones. En el medio, dividiendo las aguas que en realidad no estarán divididas en absoluto, una larga alfombra roja interrumpida únicamente por una mesa sobre la que hay cantidades de orquídeas provistas por Anette Flowers. Donde termina la alfombra esperan nuestra sommelier, Ana Paula Arias, y Gabriela Celeste, la sommelier de la bodega en la que nos adentraremos: Piccolo Banfi.

Arriba, entre mesa y mesa, enormes cabezas de unicornios blancos, con largos cuernos y ojos de un rojo sanguíneo. De expresión seria, en un lugar que propone adjetivos diferentes. Por qué no.

Lo que nos convocó es el vino, después de todo, así que vamos a eso: los vinos de Piccolo Banfi, que nos han acompañado a lo largo de los años y de los cuales enviamos dos etiquetas a nuestros socios en la caja de septiembre, vienen de Agrelo, Mendoza, y se distinguen no solo por su altísimo nivel sino también por contar con el asesoramiento y la visión de nada menos que Michel Rolland, cuya mano derecha es Gabriela Celeste.

Gabriela describe, uno a uno, los vinos que vamos degustando a lo largo de la noche: Cónclave Cabernet Cabernet (mitad Sauvignon mitad Franc); Cónclave Gran Corte (60% Malbec, 40% Cabernet Franc) y el flamante Vía Flavia, la joya de la bodega: un Petit Verdot de aquellos, y del que todos pedirán más tarde un pequeño refill.

Entre copa y copa, mientras prueban quesos de todo tipo y panes esponjosos y adictivos, nuestros socios e invitados expresan a viva voz sus opiniones, destacan alguno de los vinos, comparan, piden más datos, preguntan precios, hablan tímidos unos, muy seguros otros. Alguna que otra personalidad conocida toma el micrófono.

Después, ya con los tres vinos degustados en nuestras espectaculares copas de R Cristal, toma la palabra Diego Banfi -propietario de la bodega- para anunciar como bonus track la inminente llegada de dos nuevos vinos que inaugurarán la línea Amigazo: un Cabernet y un Petit Verdot que llegan sin etiquetas, envueltos en intriga. Pronto sabremos más.

Hay un consenso comunitario de celebrar, por lo que el volumen de la música sube, las luces bajan un poco, y todos empiezan a cruzarse de mesas, una y otra vez como en un juego de las sillas que nadie necesita coordinar. Sorteamos vinos, algunos afortunados se llevan botellas, otros se llevan orquídeas de colores furiosos, y todos se llevan el grandísimo recuerdo de una degustación memorable. Nos veremos en la próxima.

Asóciense hoy al Club Cuisine&Vins y acompáñennos en futuras degustaciones como la que tuvimos este mes. Siendo parte del Club van a recibir seis vinazos todos los meses, además de una tarjeta de beneficios exclusivos y acceso a montones de privilegios y experiencias únicas. Basta con escribirnos por mail a cuisine@cuisine.com.ar o por whatsapp al 11-2869-6069, o con llenar directamente el formulario que pueden ver en esta misma página.



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